EL BAUTISMO DE INFANTES
El bautismo de infantes
Los que tienen el oficio de bautizar saben que el bautismo no se ha de conferir temerariamente... “No den lo santo a los perros, ni arrojen su piedra preciosa a los puercos”… Todo el que pide el bautismo puede engañar o puede engañarse, y así puede ser más conveniente demorar el bautismo según la condición y disposición de las personas, y también según la edad. ¿Qué necesidad hay, cuando realmente no la hay, de poner en peligro a los padrinos, los cuales por la muerte pueden faltar a lo prometido o pueden tener con el tiempo la decepción de haber propuesto a uno de mala condición? Ciertamente dice el Señor acerca de los niños: “No les impidan que vengan a mí.” Vengan enhorabuena cuando ya empiezan a ser maduros, cuando son capaces de aprender se lespueda enseñar adónde van. Háganse cristianos cuando puedan conocer a Cristo. ¿Para qué se apresura la edad inocente hacia la remisión de los pecados? En las cosas temporales se procede con mayor cautela: ¿por qué confiar las cosas divinas a aquellos a quienes no se confían los bienes de la tierra? Que aprendan a pedir la salvación, para que claramente la des a los que la han pedido. Tertuliano (197 d.C.)
BENDICIONES
No hay comentarios:
Publicar un comentario