Actividades y posesión de demonios
Y se difundió su fama por toda Siria; y le trajeron todos los que tenían dolencias, los afligidos por diversas enfermedades y tormentos, los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y los sanó. Mateo 4:24
Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando. Hechos 16:16
Consideramos de interés para todos los hombres que no se les impida aprender esta doctrina, sino que se les exhorte a ella, porque lo que no lograron las leyes humanas, ya lo hubiera realizado el Verbo divino si los malvados demonios no hubieran esparcido muchas e impías calumnias, tomando por aliada a la pasión que habita en cada uno, mala para todo, y multiforme por naturaleza: con esos crímenes nada tenemos que ver nosotros (de la falsa acusación que los cristianos comían carne humana). Justino Mártir (160 d.C.)
Los demonios luchan esforzadamente para convertirlos en esclavos y ministros suyos, y bien por visiones en sueños, o bien por mágicos encantos, conquistan a todos aquellos que no se preocupan de su salvación. Justino Mártir (160 d.C.)
Porque ninguna otra cosa pretenden los demonios, por ninguna otra luchan, sino por apartar a los hombres de Dios creador y de su primogénito Jesucristo. Justino Mártir (160 d.C.)
Los herejes no son capaces de dar la vista a los ciegos, ni el oído a los sordos, ni expulsar a todos los demonios, sino sólo a aquellos que a ellos mismos se les meten, si es verdad lo que dicen. Ireneo (180 d.C.)
El oficio del demonio es hacer caer al hombre: bien se le conoció el intento de su malicia en la ruina del primer hombre. Ejecutan en los cuerpos enfermedades y calamitosos accidentes: en las almas pasiones repentinas, y excesos extraordinarios y violentos. Para invadir alma y cuerpo mucho les ayuda la sutileza y tenuidad. Mucho puede la valentía de los espíritus: son fuerzas casi irresistibles; tan disimuladamente ofenden, que parece más insensible el modo secreto de dañar que la espiritualidad de su naturaleza… Con el mismo secreto y con el mismo vicio apestan los entendimientos humanos, enfureciéndolos con locas lascivias, con desatinados furores, con crueles torpezas, con errores varios, de los cuales el principal y que más encarga a sus servidores, cercándoles y cegándoles la razón, es que se les sirva con viandas de olor y sangre ofrecidas a los ídolos: y el plato más regalado y más cuidadosamente apetecido es apartar a los hombres con engañosos encantos del conocimiento de la divinidad verdadera. Tertuliano (197 d.C.)
En la curación de las enfermedades, (los demonios) son llanamente beneficiosos. Primero dañan, y después dan el remedio, nuevo o contrario, y entonces se entiende que curan cuando dejan de dañar. ¿Cómo diré las fuerzas, las trazas, las artes que tienen los demonios para ingeniar encantos engañosos? Tertuliano (197 d.C.)
A más de esto los magos, con la potestad del demonio invocada y asistente, hacen que aparezcan fantasmas, que las almas de los difuntos respondan, que los niños hablen y adivinen; si con los círculos engañan los ojos con tal apariencia, soñando representan prodigios; si hacen que hablen las cabras y que adivinen las mesas; si esto hace el demonio por negociación de un mago, ¿qué hará por su interés obrando con toda su voluntad y su fuerza? Tertuliano (197 d.C.)
Asimismo, los magos no sólo conocen a los demonios, sino que incluso por medio de ellos hacen todos los prodigios con los que se divierten; bajo su inspiración e influjo realizan sus imposturas de hacer que aparezca lo que no es y que desaparezca lo que es. Hostanes, el primero de esos magos… ha proclamado que los demonios son seres terrenales, errantes y enemigos del género humano.
Marco Minucio Félix (200 d.C.)
Así es como los demonios hacen caer a las almas desde lo alto del cielo y las apartan del Dios verdadero para conducirlas a las cosas materiales; perturban la vida, inquietan los sueños; introduciéndose ocultamente en los cuerpos como espíritus sutiles, provocan enfermedades y aterrorizan la mente. Marco Minucio Félix (200 d.C.)
Nuestras oraciones derrotan a todos los demonios que provocan la guerra. Esos demonios también hacen que las personas violen sus juramentos y alteren la paz. Orígenes (225 d.C.)
BENDICIONES
LA ACTIVIDAD DEMONIACA CADA VEZ ES MAYOR, PORQUE SABE EL ENEMIGO QUE LE QUEDA POCO TIEMPO. LOS CRISTIANOS DE HOY EN DIA, TIENEN EL DEBER DE COMBATIR A TODA ACCION SATANICA. TENEMOS AL MAYOR CON NOSOTROS.QUIEN CONTRA NOSOTROS!!
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